Por María Morales M.
Cuando pensamos en los recursos financieros para desarrollar un proyecto, con el fin de optimizar el consumo energético, generar un impacto ambiental positivo y a la vez aumentar la competitividad de nuestras actividades productivas, existe un punto medular a resolver si requerimos financiamiento: ¿cuál es la fuente oportuna para adquirirlo?
Iniciemos por comprender el enfoque del financiamiento, con ello nos referimos a definir si ese se da en una estructura dentro o fuera de balance. La diferencia radica que en el segundo la operación se da sin incluir el pasivo en el balance financiero de la empresa, mientras que en el primero sí.
El financiamiento dentro de balance contempla operaciones como las emisiones corporativas, en tanto que el financiamiento fuera de balance demanda la estructuración de un Vehículo de Propósito Especial (o SPV por sus siglas en inglés).
Financiamiento dentro de balance
Para esta alternativa debemos considerar la fuente del financiamiento, la cual puede ser deuda, capital o activos, como lo veremos con mayor detalle a continuación.
- Deuda
En esta categoría encontramos los préstamos bancarios y la emisión de bonos de deuda. Entre los aspectos más destacados a comparar se encuentran la tasa de interés, el plazo, el tipo de garantía y los costos de formalización o estructuración. Particularmente, la emisión de bonos de deuda puede ser tanto pública como privada.
El financiamiento público conlleva mecanismos donde se realizan compras y ventas de valores e instrumentos financieros y se pone en contacto a oferentes y a demandantes, a través de un mercado de valores regulado.
En este caso, el tamaño del mercado permite alcanzar interés de inversionistas institucionales y premia el riesgo adicional que se toma de rendimientos que son mayores a los que se generan con productos tradicionales de ahorro. Asimismo, puede ser un esquema recurrente de re financiamiento para sustituir corto plazo por largo plazo.
Por su parte, el financiamiento privado consiste en una estructura “a la medida” que se ajusta a las necesidades específicas. Es un mercado de acceso limitado por el perfil de inversionistas sofisticados, y en su mayoría de corto plazo. Tiene mayor costo para el emisor, ya que debe ofrecer más rendimiento por el riesgo implícito.
Dicha estructura que debe homologar mejores prácticas de prospección, formalización, gobierno corporativo y seguimiento, de una estructura de financiamiento público.
- Capital
Permiten el acceso de recursos de terceros a cambio de una participación en la empresa, ya sea mediante acciones comunes o preferentes. El rendimiento está asociado al desempeño financiero de la empresa.
Este tipo de financiamiento demanda una valoración del potencial estratégico del negocio y la importancia de los órganos de gobernanza correspondientes.
- Activos
Otra forma de financiamiento es la titularización de activos, práctica que significa la transferencia de activos financieros que garantizan derechos de crédito (por ejemplo pagarés, hipotecas, colegiaturas, alquileres, etc.) hacia un inversor, mediante títulos financieros emitidos en el mercados de capitales.
Financiamiento fuera de balance
En la actualidad dadas las restrictivas condiciones financieras en las que ha caído la economía global, se hacen necesarios estos esquemas para desarrollar innovadores trajes financieros a la medida para compensar el riesgo corporativo.
Es aquí donde se introduce el concepto de “Project finance” o financiamiento de proyectos a través de Vehículos de Propósito Especial (SPV), el cual es creado con el fin de separar patrimonialmente el Proyecto del Promotor para su desarrollo.
Dicho vehículo se constituye en el emisor de valores de oferta pública o privada para financiar el desarrollo. La fuente de pago de los valores emitidos lo constituye la capacidad de generación y los activos del Proyecto, en tanto el riesgo de invertir en el SPV es independiente del riesgo del Promotor del Proyecto y de las entidades involucradas.
Los flujos futuros del SPV deben constituir respaldo suficiente para hacer frente a las obligaciones obtenidas.
Habiendo hablado de la variedad de alternativas de financiamiento, tanto dentro como fuera de balance, es importante contar con un asesor en esta materia que determine la mejor opción, ya que la modalidad a suscribir dependerá de una serie de características relacionadas con el perfil del promotor, monto de inversión, naturaleza del proyecto, gestión de riesgos, repago de flujos, entre otros.
Dos posibles mercados de fondeo
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